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Última actualización: 2024-04-29-06:01:18

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Cómo aplicar la técnica de Gestión por Excepción

En el mundo de la gestión de proyectos, hay muchas técnicas y metodologías que pueden ayudar a optimizar los procesos y garantizar el éxito de un proyecto. Una de estas técnicas es la Gestión por Excepción, que se basa en la idea de que los gerentes y líderes deben centrarse en las tareas y problemas más críticos, en lugar de dedicar tiempo y recursos a micromanagear cada detalle del proyecto.

¿Qué es la Gestión por Excepción?

La Gestión por Excepción es una técnica que se centra en la identificación y gestión de situaciones anormales o problemáticas que puedan surgir durante el desarrollo de un proyecto. En lugar de supervisar y controlar cada aspecto del proyecto de manera constante, la técnica de Gestión por Excepción permite a los líderes del proyecto delegar autoridad y responsabilidad a los miembros del equipo y solo intervenir cuando surgen problemas importantes o desviaciones significativas de los objetivos establecidos.

Esta técnica se basa en la premisa de que los equipos son capaces de gestionar la mayor parte de las tareas requeridas en un proyecto de manera efectiva y eficiente. Sin embargo, es importante establecer criterios claros para identificar qué situaciones requieren intervención y cuáles pueden ser manejadas por el equipo sin supervisión directa.

Beneficios de la Gestión por Excepción

La adopción de la técnica de Gestión por Excepción puede tener varios beneficios para un proyecto:

1. Optimización del tiempo y los recursos: Al permitir que los líderes del proyecto se centren en las tareas críticas, se evita la dedicación excesiva de tiempo y recursos a aspectos secundarios o de menor importancia.
2. Mayor autonomía y empoderamiento del equipo: Al delegar autoridad y responsabilidad en los miembros del equipo, se fomenta su crecimiento y desarrollo profesional, y se promueve un sentido de empoderamiento e involucramiento en el proyecto.
3. Identificación temprana de problemas: Al establecer criterios claros para la intervención, se facilita la detección temprana de problemas o desviaciones significativas, lo que permite tomar medidas correctivas de manera oportuna.
4. Aumento de la eficiencia y productividad: Al minimizar la microgestión y los procesos burocráticos, se permite que el equipo se enfoque en las tareas clave y aumente su eficiencia y productividad.

La Gestión por Excepción no solo es aplicable a proyectos, sino que también puede ser utilizada en la gestión diaria de tareas y actividades. Por ejemplo, en la gestión de procesos empresariales, se puede utilizar esta técnica para identificar y resolver problemas operativos de manera más efectiva.

Caso de estudio: La gestión de riesgos como elemento clave en los proyectos de infraestructura [Fuente]

Un ejemplo de aplicación de la Gestión por Excepción se puede observar en la gestión de proyectos de infraestructura. Según un artículo publicado en Integral S.A., la gestión de riesgos es un elemento clave en este tipo de proyectos.

En este caso, la noticia destaca la importancia de identificar y evaluar los riesgos que pueden surgir a lo largo de la vida de un proyecto de infraestructura. Para ello, se deben establecer puntos de referencia, definir objetivos y utilizar matrices de riesgos como herramientas de información y apoyo en la toma de decisiones.

La técnica de Gestión por Excepción se relaciona directamente con este caso, ya que permite priorizar la gestión de los riesgos más significativos y críticos para el éxito del proyecto. Los líderes del proyecto pueden establecer criterios claros para intervenir en situaciones de alto riesgo o desviaciones significativas de los objetivos establecidos, mientras confían en que el equipo puede gestionar eficientemente las tareas de menor riesgo.

En este caso, el riesgo potencial asociado con la noticia es la falta de una adecuada gestión de los riesgos en proyectos de infraestructura. Si no se aplican técnicas como la Gestión por Excepción, existe la posibilidad de que los riesgos no sean identificados y gestionados de manera adecuada, lo que puede resultar en retrasos, sobrecostos o incluso el fracaso del proyecto.

La oportunidad que se puede aprovechar es la implementación de la técnica de Gestión por Excepción en proyectos de infraestructura, lo que permitirá una gestión más eficiente y efectiva de los riesgos y, en última instancia, aumentará las probabilidades de éxito del proyecto.